El presidente del Gobierno de Canarias, Paulino Rivero, ha asegurado que llegarán hasta las "últimas consecuencias" para que no "hipotequen" el futuro del archipiélago, en referencia a la autorización que hace una semana realizaba el Consejo de Ministros para que Repsol pueda hacer prospecciones petrolíferas en aguas cercanas a las islas y comprobar la existencia o no de energía fósil.
"Vamos a llegar hasta las últimas consecuencias para evitar que nos hipotequen el futuro. Todo por otorgar unos beneficios a una empresa privada; y la posición del Gobierno de España es defender el interés de una empresa privada, no el interés general, cuál es el interés general aquí", se cuestionó el presidente canario, que añadió que tanto Noruega como Brasil han nacionalizado el petróleo.
Así se mostraba Rivero en la rueda de prensa que ha ofrecido este viernes con los presidentes de los cabildos de Lanzarote y Fuerteventura, Pedro San Ginés y Mario Cabrera, respectivamente, para insistir en la postura de Canarias contra las prospecciones petrolíferas.
En el acto también se han dado cita representantes institucionales y personal de colectivos ecologistas que portaban una pancarta bajo el lema 'No a la destrucción del mar. Canarias dice no a la prospección'.
Rivero recordó que el Parlamento autonómico ha acordado solicitar la paralización de las autorizaciones de prospecciones, mientras que ayuntamientos de Lanzarote y Fuerteventura, junto con los cabildos de estas islas han demandado la paralización de las mismas. A ello, sumó la iniciativa del Gobierno canario que ha acordado interponer un recurso al Tribunal Supremo con el mismo objetivo, paralizar las prospecciones.
Además, el jefe del Ejecutivo canario reiteró que las instituciones y los ciudadanos que se oponen a la industria petrolera no lo hacen de una "forma caprichosa" porque "no se trata de una posición caprichosa, se trata de una posición razonada y que tiene sus apoyos fundamentales en el modelo económico" y volvió a resaltar las "enormes posibilidades" que ofrece la naturaleza del archipiélago y que permite otras industrias centradas en su cielo o el mar, entre otros.
En este sentido, apuntó que es en el que se ha desarrollado el turismo y aunque reconoció que este sector económico debe complementarse con otro tipo de industria, esta debe ser "sostenible en el tiempo" porque reiteró que Canarias defiende un modelo económico ligado a la sostenibilidad.
Rivero reitero que en Canarias el turismo significa el 30 pro ciento del Producto Interior Bruto (PIB) pero en el caso de Lanzarote y Fuerteventura "se habla de otra magnitud", ya que supone el 51 y 53 por ciento del PIB para Lanzarote y Fuerteventura, respectivamente.
Por todo ello, se cuestionó si "merece la pena arriesgar todo un modelo económico por permitir una actividad económica de riesgo porque ellos mismos reconocen que hay riesgo", y aquí el presidente canario apuntó que en el caso de Canarias serían prospecciones "a una gran profundidad que no es habitual" y como ejemplo puso los vertidos del Golfo de México donde se tardó en parar el vertido porque debido a su profundidad los buzos no pudieron ponerle fin.
En cuanto al empleo prometido, afirmó que Repsol se ha retractado, ya que si en un principio decían que crearían 50.000 empleos, "ya reconocen que no hay empleo"; también criticó que se refieran a Marruecos, en relación a que si no lo saca Canarias lo hará el país vecino.
Al respecto, Rivero dijo que "son dos cosas diferentes, son dos yacimientos que no tienen que ver nada uno con el otro" porque aseguró que las concesiones de Marruecos están en la "plataforma continental entre 50 y 200 metros de profundidad máxima; en Canarias está en el talud continental con profundidad entre 500 y 1.500 metros". Agregó que Marruecos "puede extraer su petróleo con las debidas garantías" que se exigirán.
PUNTO MÁS PRÓXIMO A 9 KILÓMETROS
El presidente canario ha incidido en que el Consejo de Ministro autorizó las prospecciones para un espacio de 6.500 kilómetros, "que es prácticamente la superficie" de Canarias, para hacer "todos los pinchazos", y las cuadrículas estiman que el punto "más próximo" a la costa está algo más de "9 kilómetros de la costa de El Castillo".
En comparación con Valencia, subrayó que las prospecciones que están autorizadas el punto "más cercano es a 4 kilómetro" pero si utilizan el "mismo criterio" que con Canarias, en referencia al punto más lejano para hacer prospecciones y que en el archipiélago se apunta a 61 kilómetros, en Valencia dicho punto "está a 103 kilómetros".
Rivero también quiso matizar que los petroleros que pasan por Canarias "están autorizados a pasar por unos pasillos para que no dañen la biodiversidad".
LLAMAMIENTO A LOS CIUDADANOS
El presidente canario aprovechó para hacer un llamamiento a la ciudadanía para que este sábado, 24 de marzo, salga a la calle para protestar contra las prospecciones. "Necesitamos sumar fuerzas para que la voz de los canarios se haga oír", apuntilló.
En este tono también se pronunció el presidente del Cabildo de Lanzarote, Pedro San Ginés, quien dijo que, "de momento los políticos deben callarse para que mañana sea la sociedad civil la que diga alto y claro a Canarias, a España y al mundo, que Canarias dice no a las petroleras y sí a las renovables".
Así, pidió que sea el pueblo el que "tome la calle" este sábado porque tiene que "ser una marea humana que aleje a los fantasmas".
San Ginés criticó la decisión adoptada por el Gobierno central al considerarla una "falta de respeto a los canarios, y por el pisoteo a las más básicas y elementales normas".
Añadió que se trata de decisiones que "han ignorado a Canarias" e ironizó que José Manuel Soria como ministro de Industria y Turismo en Valencia "parece que ahí si es de Turismo y en Canarias de Industria".
De todos modos, calificó de "magnífico" el que "todas" las administraciones, desplieguen o vayan a desplegar "todos sus recursos para defender" el archipiélago.
Por otro lado, el presidente del Cabildo de Fuerteventura, Mario Cabrera, señaló que los ciudadanos van a salir a la calle para que en el resto de territorios "no piense que todos los canarios son igual que Soria".
Cabrera también acusó a Soria de intentar "ningunear a todas" las instituciones canarias" y pidió respeto para las instituciones porque "no puede el Gobierno de España saltase a la torera todo lo que están diciendo las instituciones".
Además, advirtió de que esta cuestión está creando en Canarias un sentimiento "que empieza a preocupar, que es anti, anti lo que sea". Otra de las cuestiones que puso de relieve es que Marruecos ya ha dicho que hay que sentarse a hablar. Agregó que una plataforma petrolífera crea "77 puestos de trabajo frente a los 50.000" que había cifrado Repsol.
"Ante la arrogancia de Soria no nos ha quedado otro remedio que salir a la calle. No nos van a separar", concluyó.
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