EQUO advierte que la reforma sanitaria supone un importante retroceso y tendrá repercusiones negativas en la salud pública.
Para EQUO se ha roto el principio de Sanidad Universal, expulsando a los colectivos más vulnerables del sistema y exigiendo el pago farmacéutico a los que menos tienen.
EQUO ha advertido de la gravedad de la reforma sanitaria aprobada por el Partido Popular, y publicada ayer en el BOE, ya que rompe con un modelo sanitario que ha funcionado de forma muy positiva en los últimos 30 años y que garantizaba un derecho básico y fundamental para la población.
Para el Portavoz de EQUO, Juan López de Uralde, es “indignante que en poco más de cinco meses el gobierno haya dilapidado uno de los pilares básicos de nuestro Estado de bienestar: la Sanidad Universal. Poniendo en marcha una reforma que expulsa a más de 500.000 personas del sistema sanitario y castiga a la población mayor por el hecho de serlo”.
En esta reforma, para EQUO es especialmente grave la decisión de retirar la tarjeta sanitaria a las personas que se encuentran en situación irregular en nuestro país, más de 500.000. “Es una medida injusta e inhumana que además puede tener efectos negativos para la Salud Pública y que en cualquier caso, es tremendamente insolidaria y utiliza argumentos xenófobos muy peligrosos e irresponsables” ha afirmado Uralde quien ha explicado que esta decisión “rompe con la equidad y universalidad del sistema”.
Asimismo, EQUO también ha criticado que se excluya igualmente a los mayores de 26 años que no coticen y que sobrepasen un determinado nivel de ingresos porque incide en la misma idea de acabar con un derecho básico universal.
Con respecto al aumento del copago farmacéutico que incluye el pago de las recetas por parte de los jubilados, EQUO ha criticado que “se está culpabilizando a los enfermos y personas mayores en lugar de apostar por una buena Atención Primaria que es lo que realmente garantiza la sostenibilidad del sistema y supone a la larga un importante ahorro”.
Para EQUO el hecho de que “en cinco meses hayamos retrocedido décadas en derechos básicos no solo es preocupante sino un abuso democrático”.
Nota de prensa EQUO
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